Ciudades flotantes
El mundo actual enfrenta dos grandes problemas: el crecimiento urbano descontrolado y el aumento constante del nivel del mar. Ante estas situaciones surge una idea que pudiera dar solución a ambas problemáticas; migrando las ciudades costeras a urbes flotantes ancladas a 2km de la costa.
Así nace Oceanix, el proyecto de ciudades flotantes modulares que puedan adaptarse al aumento del nivel del mar, capaces de acoger a 10,000 habitantes en hasta 75 hectáreas, con ciudades que crecen gradual y ordenadamente.
Aunque han existido en el pasado otros proyectos visionarios y dignos de películas de ciencia ficción; esta idea ya ha recibido el respaldo de las Naciones Unidas a través de una alianza con ONU-Habitat, sumando a decenas de expertos de la ONU, el M.I.T. y al reconocido arquitecto danés Bjarke Ingels en el proyecto.
Todo comenzó como una idea de Marc Collins Chen, CEO de Oceanix y exministro de turismo de la Polinesia francesa, sitio en donde el constante aumento del nivel del mar ha desaparecido por completo cinco islas desde el 2016.
Este innovador modelo de urbe reinventa el concepto de ciudad, utilizando infraestructura y sistemas urbanos sostenibles para reducir al máximo su impacto ambiental. El diseño urbano permite unir hasta seis módulos, de 2 hectáreas cada uno, con una distribución circular que coloca servicios públicos y espacios sociales al centro.
Los promotores de Oceanix esperan tener el primer prototipo habitado en dos años; pero sobretodo buscan ser una inspiración para que las urbes terrestres empiecen a adoptar un nuevo funcionamiento, más amigable con el mundo y que responda a los cambios que necesitamos hacer como sociedad urgentemente.